Fazliddin Kurbanov vivía en el estado de Idaho. Nació en Uzbekistán y era un refugiado político. Construía bombas que iban a ser detonadas en transportes públicos
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Fazliddin Kurbanov era un camionero, hablante de ruso, que llegó a Idaho hace casi cuatro años, para unirse a otros cientos de refugiados provenientes de Uzbekistán, para quienes este estado se ha convertido un santuario donde pueden estar a salvo de la violencia en su país natal.
Pero las autoridades federales dicen en un pliego acusatorio que Kurbanov enseñaba también a la gente cómo fabricar bombas que serían detonadas en el transporte público.
Se desconoce si los presuntos objetivos de los ataques se encontraban en Estados Unidos o en el extranjero. Se ignora también cuán lejos hubiera llegado Kurbanov en sus planes. Los fiscales sólo dijeron el viernes que el uzbeco no representa ya una amenaza.
Kurbanov, de 30 años, fue detenido el jueves durante una redada en su pequeño apartamento, en el sur de la ciudad de Boise.
Los fiscales le fijaron cargos graves en Idaho y Utah, después de una amplia investigación emprendida en los dos últimos años sobre sus actividades. Alegan que esos actos incluían prestar ayuda a una milicia en su natal Uzbekistán, un país del centro de Asia que colinda al sur con Afganistán.
"Dado su arresto, creemos que ha sido conjurada cualquier amenaza potencial que él haya representado", dijo la fiscal federal Wendy Olson. Destacó que la investigación prosigue, pero se negó a decir si los agentes federales buscan realizar otros arrestos.
Kurbanov habló poco el viernes durante su primera comparecencia ante la corte,donde se declaró inocente con ayuda de un intérprete y de un abogado de oficio. El acusado vestía un overol de presidiario, tenía el cabello oscuro y llevaba una barba mucho más corta de la que lucía en una foto correspondiente a su licencia de automovilista de Idaho.
En los documentos presentados ante la corte, Kurbanov menciona que el uzbeco es su lengua natal y el ruso su segundo idioma. Funcionarios federales indicaron que solicitarán otra vez la ayuda de un intérprete el martes, cuando Kurbanov comparezca para su audiencia de detención.
Hasta entonces, Kurbanov permanecerá preso en la cárcel del condado de Ada. Su juicio por los tres cargos interpuestos en Idaho está previsto para el 2 de julio. Su abogado Richard Rubin se negó a emitir comentarios.
Kurbanov figura entre 650 uzbecos que residen en Idaho. Se le admitió en Estados Unidos como refugiado en agosto de 2009, el mismo mes en que se mudó a Boise, dijo Jan Reeves, director de la Oficina para los Refugiados en Idaho, citando expedientes de inmigración. Kurbanov estaba en el país legalmente, dijeron funcionarios federales.
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