El delantero portugués Cristiano Ronaldo se convirtió nuevamente en el mejor jugador del mundo. Recuperó el trono. Luego de un calendario repleto de goles, Cristiano ganó el Balón de Oro en su versión 2013.
El atacante luso cortó la hegemonía de Lionel Messi, ya que el argentino se había quedado con el premio en las últimas cuatro ediciones. Entre 2009 y 2012, el hombre del Barcelona siempre había obtenido el trofeo.
Pero el delantero del Real Madrid, a quien ya le habían otorgado el galardón en 2008cuando jugaba en el Manchester United, volvió a subirse a la cima del fútbol mundial y se colgó otra vez el cartel de "mejor futbolista del mundo".
Le dio un beso a su novia Irina y caminó muy emocionado al escenario. Saludo a Pelé, a su hijo y comenzó el discurso. "Buenas noches, no hay palabras para describir esto. Gracias a mis compañeros del Real Madrid y de la selección", empezó diciendo "CR7" entre lágrimas.
Logró el premio por sus actuaciones individuales. Sin títulos colectivos, el portugués hizo un anuario espectacular de goles. Fueron 69 gritos (14 asistencias) en 58 partidos.
Lo único que se le puede adjudicar como premio es terminar como máximo anotador en la última Champions League con 12 tantos. Sus inapelables rendimientos fueron una constante que todavía está de pie. De hecho, es el actual goleador del Real Madrid.
Y no hay que pasar por alto que Portugal también lo disfruta y le debe la clasificación al Mundial. Metió el 1-0 en la ida del repechaje ante Suecia y guardó otros tres goles para la vuelta. Un verdadera bestia del gol.
"Es un honor enorme. Ha sido gracias a mi presidente, a muchas personas que están aquí, a Eusebio, a mi novia, a mi hijo. Es un momento muy emocionante para mí y no puedo hablar más", cerró Ronaldo, que no paró de llorar en ningún momento.
Por su parte, en el fútbol femenino, el premio fue para Nadine Angerer. El Balón de Oro a la mejor jugadora de 2013 es para la guardameta alemana que fue clave para la obtención de la Eurocopa, donde atajó dos penales en la final.